La dieta personalizada

Hoy en Farmacia Moré vamos a hablar sobre un tipo de dieta muy sana que no tiene nada que ver con las dietas de hidratos de carbono o de calorías que normalmente suele encontrar. Esta dieta es tan fácil que la puede comenzar usted mismo, ya que tan sólo consiste en ir combinando alimentos de tal forma que en poco tiempo descubramos con qué alimentos engordas más y con cuáles no. De esta forma podremos determinar la dieta ideal para cada persona, e incluso podemos hacer más o menos hincapié en determinadas zonas del cuerpo como caderas, muslos, piernas, glúteos, etc.

Este efectivo y natural régimen consta de 3 etapas, en las que se trabajará una parte esencial del proceso. El primero de ellos consiste en el periodo de adelgazamiento, donde perderemos el peso que queramos siempre teniendo en cuenta el análisis de su constitución y de su masa corporal para no llegar al extremo.

Siguiendo adecuadamente dieta se puede perder un 10% del peso al mes!!

A continuación nos encontramos con el periodo de mantenimiento, que consiste en que cuando ya hemos alcanzado el peso ideal, debemos asegurarnos de que no volvemos a engordar. Para ello iremos introduciendo otros tipos de alimentos y observando la respuesta de nuestro organismo.

Por último, hay que seguir ciertos consejos  que mantendrán nuestro peso de por vida:

El desayuno siempre es como el primer día de cada semana, donde se puede comer café con leche desnatada, jamón york, pavo cocido, pechuga de pollo, salchichas o alguna fruta como piña, manzana, sandia, pera o naranja. Este desayuno se puede repetir dos veces en la mañana, aunque lo recomendable fuese una sola vez.

Además de los menús diarios, usted puede picar entre horas, es decir, a media mañana y a media tarde, los siguientes alimentos.


- Zumos dietéticos (hasta vaso y medio al día), siempre de herboristería.


- Consomé de pollo natural o sopa de verduras.


- Jamón York,  pechuga de pavo o pollo, pavo trufado, chope y mortadela de pavo, pollo frio cocido.


- Café, té o infusiones con sacarina.


- Marisco (gambas, quisquillas, langostinos…).


- Dos rodajas de piña.


A la hora de cambiar o sustituir alimentos debemos saber que al ser una combinación de alimentos la dieta, no se puede cambiar unos alimentos por otros, sino gusta alguno de ellos, se deberá de preguntar antes de estropear la dieta (aun siendo semejante en su valor nutritivo). Tampoco debemos cambiar la comida por la cena o viceversa.

Tampoco debemos comer nada que no venga definido en la dieta porque podemos interferir en la digestión y combinación de las comidas.

Solo se debe utilizar en la preparación de las comidas: aceite, sal y vinagre, pues cualquier otras especias dificultan la digestión retrasándola y por consiguiente, retención de líquidos y disminuir la pérdida de peso. El limón se usa en cantidades moderadas y no siempre, al igual que el ajo se añade para dar sabor, pero no se come.

En este momento cabe destacar que se puede comer todo lo que apetezca de los alimentos que menciono en la dieta, puesto que no es una dieta de calorías, pero también cabe pensar que existe una moderación y prudencia. Lo que si está claro es que hay veces que mientras más se coma, más estimulo el metabolismo y menos hambre pasaré.

Podemos decir que al ser una dieta donde intento conocer los alimentos que le engordan a una persona, favorecer las digestiones,  así como aumentar el metabolismo, debemos de centrarnos casi exhaustivamente a la alimentación que encontramos en cada dieta.